martes, 14 de agosto de 2007

Bienvenida

Estimados colegas: Es para mi un placer compartir con ustedes esta experiencia de aprendizaje en torno al proceso de escritura apoyada en el uso de las tecnologías digitales.
Mi formación profesional inicial fue en Enseñanza del Castellano y Literatura. Durante nueve años tuve la oportunidad de trabajar con adolescentes costarricenses de zonas urbanas y diariamente me enfrenté a la apatía de ellos por aprender a escribir y leer. No obstante siempre mantuve mi entusiasmo y esperanza de encontrar formas de lograr que los/las jóvenes se interesaran por conocer los secretos de nuestra lengua materna y así lograran alcanzar las habilidades necesarias para poder comunicarse con éxito a traves de la lengua escrita. Esto me llevó a explorar diferentes técnicas, algunas exitosas y otras no.
Posteriormente los caminos de la vida me llevaron a trabajar al Programa de Informática Eductiva del MEP - FOD. Aunque llegué como administradora de este , mi interés por la docencia y las posibilidades que empecé a descubrir ofrecían las tecnologías de la información y la comunicación para la enseñanza - aprendizaje de la escritura me llevaron a formarme a nivel de maestría en esa área . Después de ocho años de trabajar fuerte por la consolidación de la informática educativa en Costa Rica (a nivel administrativo), decidí seguir cooperando con esa experiencia pionera; pero en el diseño de proyectos de lengua y cultura apoyados en el uso de la tecnología computacional. Finalmente mi interés por la docencia y por compartir los aprendizaje construidos durante los últimos once años con los estudiantes que se forman para ejercer la docencia y docentes en servicio interesados en actualizarse u obtener otros grados profesionales, me llevo nuevamente a las aulas universitarias y a cooperar con programas de capacitación a docentes en servicio que me brindan la posibilidad de seguir creciendo al compartir mis aprendizajes, mis ideas, mis inquietudes con ustedes, quienes sabrán enriquecerlas con su experiencia, su entusiasmo y sus cuestinamientos.

Disfrutemos la oportunidad que nos brinda la Asociación de Empresarios para el Desarrollo (AED) de construir aprendizajes en torno a esta temática.